domingo, 22 de diciembre de 2013
sábado, 7 de diciembre de 2013
Todo lo que siempre me queda, desde un principio.
Una foto.
Veja,arrugada.
Ya se notan todos los años desde que fue tomada, comenzando porque en ella soy una niña, y ahora soy una mujer. Se notan los pliegues, de tanto que la he doblado, y aquella mancha en la esquina, cuando sin querer se mojó.
Está rota.
Como mi familia.
Está mi madre, su sonrisa siempre dispuesta, y las arrugas en sus ojos cada vez que lo hacía. Hermosa. Aún me pregunto cuándo fue que cruzamos la línea entre contarnos todo, a ser completas desconocidas con recuerdos en común. A escondernos en el tiempo, y vernos sólo en las cenas familiares, una vez cada año. Es gracioso, porque dije que estaría con ella por siempre, y ahora es raro si la veo.
Luego están mis hermanos, seres completamente desconocidos para mí como yo para ellos. Cuerpos con mi misma sangre a los que debo llamar "familia" porque eso dicta un código genético, cuando no reconozco nada de mí en ninguno de ellos, cuando a duras penas sé de su vida algún tiempo.
Mi padre termina la foto.
A veces hay mucho que decir, otras no tanto.
Como siempre fue nuestra relación.
Mi insistencia a intentarlo, y su insistencia en ser un extraño para mí. Una base de datos al que llamé "papá", un persistente recuerdo de la figura paterna que siempre quise, y no tuve.
Yo estoy en el medio de todo.
Creciendo entre personas desconocidas, anhelando cosas que hasta mayor no supe que quería. Haciendo amigos de papel, imaginarios, distorsionando la realidad hasta el punto de convertirme en piedra y soportar ser pateada por la vida; por la familia a la que nunca pude llamar hogar.
Pero siempre queda la foto.
Un recuerdo de una familia imaginaria, de personas creando un mundo de amor para mi futuro, para mi vida, para mí.
Una foto.
Donde, aparentemente, todos nos amamos.
Una foto.
Veja,arrugada.
Ya se notan todos los años desde que fue tomada, comenzando porque en ella soy una niña, y ahora soy una mujer. Se notan los pliegues, de tanto que la he doblado, y aquella mancha en la esquina, cuando sin querer se mojó.
Está rota.
Como mi familia.
Está mi madre, su sonrisa siempre dispuesta, y las arrugas en sus ojos cada vez que lo hacía. Hermosa. Aún me pregunto cuándo fue que cruzamos la línea entre contarnos todo, a ser completas desconocidas con recuerdos en común. A escondernos en el tiempo, y vernos sólo en las cenas familiares, una vez cada año. Es gracioso, porque dije que estaría con ella por siempre, y ahora es raro si la veo.
Luego están mis hermanos, seres completamente desconocidos para mí como yo para ellos. Cuerpos con mi misma sangre a los que debo llamar "familia" porque eso dicta un código genético, cuando no reconozco nada de mí en ninguno de ellos, cuando a duras penas sé de su vida algún tiempo.
Mi padre termina la foto.
A veces hay mucho que decir, otras no tanto.
Como siempre fue nuestra relación.
Mi insistencia a intentarlo, y su insistencia en ser un extraño para mí. Una base de datos al que llamé "papá", un persistente recuerdo de la figura paterna que siempre quise, y no tuve.
Yo estoy en el medio de todo.
Creciendo entre personas desconocidas, anhelando cosas que hasta mayor no supe que quería. Haciendo amigos de papel, imaginarios, distorsionando la realidad hasta el punto de convertirme en piedra y soportar ser pateada por la vida; por la familia a la que nunca pude llamar hogar.
Pero siempre queda la foto.
Un recuerdo de una familia imaginaria, de personas creando un mundo de amor para mi futuro, para mi vida, para mí.
Una foto.
Donde, aparentemente, todos nos amamos.
viernes, 6 de diciembre de 2013
Escuchó el sonido de los pasos, antes que el pestillo de la
puerta.
Estaba vestida otra vez, con los tacones
en sus manos y lágrimas en los ojos.
— ¿Adónde crees que vas? —Dijo.
—Me voy. —Ella contestó.
— ¿Te vas? No lo entiendo, qué te sucede, —calló un momento y luego dijo— ¿Hice algo mal?
—No, pero lo harás. Así que estoy yéndome, estoy dándome la oportunidad
de dejarte. Antes que tú me dejes a mí, porque lo harías, todos siempre lo
hacen. No me permitiré que esto sea más que una noche. Porque eso es todo lo
que es, nada más. No puedo dejar que sea algo más, porque ya estoy cansada del
dolor y el abandono, de las falsas
ilusiones que estúpidamente me hago que no llegan a ningún lado. El falso amor que todos profesan, un “siempre” que dura dos días. Como
encariñarme contigo, y tener miedo de que algún día salgas y me dejes. Rota,
vacía, sin nada. Así que estoy yéndome.
lunes, 4 de noviembre de 2013
Por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, por qué, Por qué.
domingo, 3 de noviembre de 2013
martes, 29 de octubre de 2013
“He is a part of me, always will be, and I am a part of him, too.
I don't belong to Abnegation, or Dauntless, or even the Divergent.
I don't belong to the Bureau or the experiment or the fringe.
I belong to the people I love, and they belong to me—they, and the love and loyalty I give them, form my identity far more than any word or group ever could.”
sábado, 19 de octubre de 2013
domingo, 29 de septiembre de 2013
miércoles, 14 de agosto de 2013
Invisible, invisible, invisible. invisible, así me he sentido toda mi vida.
Queriendo desaparecer cuando realmente ya estaba desaparecida.
Preguntándome sí le importaría a alguien, o sí alguien notaría sí desapareciera.
Nunca al frente de la conversación, sino detrás, en el fondo, callada.
Sin que nadie note o le importe mi opinión de algo.
La tercera rueda, el número cinco en un grupo.
La fea de un grupo de amigas lindas.
Siempre, siempre, siempre así.
Invisible.
Sin importar, sin que nadie repare en mi presencia, sin ninguna opinión aceptable hacia el mundo.
Y nunca sé sí hay alguien que lo nota, nunca, nunca, nunca, nunca, mientras que quiero que alguien lo note.
No sé cuántas personas reparan, realmente, sobre mi existencia en este mundo.
Queriendo desaparecer cuando realmente ya estaba desaparecida.
Preguntándome sí le importaría a alguien, o sí alguien notaría sí desapareciera.
Nunca al frente de la conversación, sino detrás, en el fondo, callada.
Sin que nadie note o le importe mi opinión de algo.
La tercera rueda, el número cinco en un grupo.
La fea de un grupo de amigas lindas.
Siempre, siempre, siempre así.
Invisible.
Y nunca sé sí hay alguien que lo nota, nunca,
No sé cuántas personas reparan, realmente, sobre mi existencia en este mundo.
Todo.
Fuiste todo.
Todo lo que me permití en la vida.
Todo lo que pensé que sería duradero y para siempre.
Todo lo que alguna vez quise.
Fuiste absolutamente todo, y como todo, acabaste en un suspiro.
Todo lo que me permití en la vida.
Todo lo que pensé que sería duradero y para siempre.
Todo lo que alguna vez quise.
Fuiste absolutamente todo, y como todo, acabaste en un suspiro.
Tú ausencia.
¿Cuántas veces he llorado por tú culpa?
¿Cuántas veces me he imaginado que me abrazas y que me dices que me quieres?
¿Cuántas veces he querido escuchar un 'estoy tan orgulloso de ti' por tú parte?
¿Y cuántas veces he querido hablar contigo y nunca estás?
Quiero ser pequeña otra vez, cuando supongo que me querías tanto como para llevarme a pasear, pasar tiempo conmigo y estar ahí cuando supongo que te necesitaba. O cuando no me importa si estabas o no, creo. Siempre he estado sola, como un caparazón vacío, intentando llenar tú espacio.
¿Cómo, después de tantos años, esperas cariño en devoción?
Algunas veces me pierdo en pensamientos oscuros, intentando odiarte, y lo intento, lo intento, lo intento.Y luego sé que eso está mal e intento amarte tanto como quiero odiarte; y entonces pones todo más difícil y me vuelvo a encerrar en mis pensamientos y sólo quiero llorar.
No sé cuántas veces he intentado hacer cosas buenas, intentar hacerte sentir orgulloso, o que simplemente hables conmigo como lo haría una persona más. Pero tú no eres una persona más. Tú eres tú.
Por ti. Por tú culpa. Por tu ausencia. Por todas las cosas que quería hacer y nunca haré. Por todas las películas que quería imitar donde siempre estuviéramos juntos, pero sé que es mentira. Por todas las veces que te has ido o no has estado en momentos importantes.
Tú ausencia.
Todo lo que me dejaste un día.
Todo lo que siempre me vas a dejar.
¿Cuántas veces me he imaginado que me abrazas y que me dices que me quieres?
¿Cuántas veces he querido escuchar un 'estoy tan orgulloso de ti' por tú parte?
¿Y cuántas veces he querido hablar contigo y nunca estás?
Quiero ser pequeña otra vez, cuando supongo que me querías tanto como para llevarme a pasear, pasar tiempo conmigo y estar ahí cuando supongo que te necesitaba. O cuando no me importa si estabas o no, creo. Siempre he estado sola, como un caparazón vacío, intentando llenar tú espacio.
¿Cómo, después de tantos años, esperas cariño en devoción?
Algunas veces me pierdo en pensamientos oscuros, intentando odiarte, y lo intento, lo intento, lo intento.Y luego sé que eso está mal e intento amarte tanto como quiero odiarte; y entonces pones todo más difícil y me vuelvo a encerrar en mis pensamientos y sólo quiero llorar.
No sé cuántas veces he intentado hacer cosas buenas, intentar hacerte sentir orgulloso, o que simplemente hables conmigo como lo haría una persona más. Pero tú no eres una persona más. Tú eres tú.
Por ti. Por tú culpa. Por tu ausencia. Por todas las cosas que quería hacer y nunca haré. Por todas las películas que quería imitar donde siempre estuviéramos juntos, pero sé que es mentira. Por todas las veces que te has ido o no has estado en momentos importantes.
Tú ausencia.
Todo lo que me dejaste un día.
Todo lo que siempre me vas a dejar.
viernes, 9 de agosto de 2013
¿De qué vale creer en las estrellas fugaces, pestañas caídas, o velas de cumpleaños?
Son objetos tan normales, comunes, corrientes.
¿Qué es una estrella fugas? Una piedra, un meteoro, un pedazo de algo más grande allá fuera de la tierra.
¿Cuántas pestañas no se me habrán caído sin que me diera cuenta?
¿Cuantas velas de cumpleaños no habré usado cuando se ha ido la luz y necesito ver con claridad, antes de llevarme cosas por delante.
Necesitamos creer en tantas cosas mágicas, tantas cosas improbables tantos deseos perdidos que no se cumplieron e igual lo seguimos pidiendo.
Son objetos tan normales, comunes, corrientes.
¿Qué es una estrella fugas? Una piedra, un meteoro, un pedazo de algo más grande allá fuera de la tierra.
¿Cuántas pestañas no se me habrán caído sin que me diera cuenta?
¿Cuantas velas de cumpleaños no habré usado cuando se ha ido la luz y necesito ver con claridad, antes de llevarme cosas por delante.
Necesitamos creer en tantas cosas mágicas, tantas cosas improbables tantos deseos perdidos que no se cumplieron e igual lo seguimos pidiendo.
sábado, 3 de agosto de 2013
miércoles, 19 de junio de 2013
...
Prendí fuego en mí.
Vi
cómo quemaba tu rostro.
Mientras
ardías en las llamas, y gritabas mi nombre.
Sentía algo morir.
Nos
prendí fuego y nos arrojé al vacío.
Esperando
llenar la soledad.
Esperando
que esta fuera la última vez.
La
última vez.
Y las llamas ardieron.
Y quemaron todo a su paso.
Y nuestros corazones morían con cada
flama acabada.
Ardimos
como nunca antes.
Prendiendo
todo a nuestro al rededor.
Axfisiándo cada cosa que tomamos.
Dejando una quemadura al mundo.
Ardiendo.
Como una
hoguera.
Como
fogatas al rededor de una sequía.
Como
lo más caliente del Infierno.
Nos
prendí fuego y nos arrojé al vacío.
Para que llenara esta
soledad.
Memoricé cada parte de tu cuerpo.
Conocí cada milímetro de tu piel.
Supe cómo se movían cada una de tus pestañas.
Aprendí cada uno de tus hábitos al levantarte.
Supe el sabor de cada uno de tus besos.
Conocí el calor de tu espalda y los latidos de tu corazón.
Supe cada una de tus técnicas de amar.
Memoricé cada uno de tus suspiros y respiraciones, cada subida o bajada de tu pecho.
Me acostumbré a tus manos siempre encima de mí, y a cada sonrisa robada que podía sacarte.
Aprendí todas las cosas de ti, excepto qué pasaría cuando ya no te conociera...
Conocí cada milímetro de tu piel.
Supe cómo se movían cada una de tus pestañas.
Aprendí cada uno de tus hábitos al levantarte.
Supe el sabor de cada uno de tus besos.
Conocí el calor de tu espalda y los latidos de tu corazón.
Supe cada una de tus técnicas de amar.
Memoricé cada uno de tus suspiros y respiraciones, cada subida o bajada de tu pecho.
Me acostumbré a tus manos siempre encima de mí, y a cada sonrisa robada que podía sacarte.
Aprendí todas las cosas de ti, excepto qué pasaría cuando ya no te conociera...
¿Realmente algo te pertenece? ¿O le perteneces realmente a alguien?
Algo verdaderamente mío... usamos tantas expresiones como 'mi' amigo, 'mi' amor, 'es mío', ¿pero qué verdaderamente es de nosotros? Puedo hablar de mis amigos y no saber sí ellos de verdad se consideran míos, puedo hablar de mi amor y no saber sí soy realmente correspondida.
¿Cuándo se supone que le pertenecemos a alguien? ¿Cuándo podemos decir que esa persona está entregando tanto de sí como uno mismo lo está haciendo? ¿Cuándo podría decir mío, sin estricto derecho de propiedad? Mío da sentido de propiedad, pero, ¿quién dijo que las personas terminan siento estrictamente nuestras?
Nunca somos eternamente de nuestros padres y nuestros padres no son eternamente nuestros.
Nuestros amigo no son enteramente nuestros y nosotros de ellos tampoco.
Nuestros amores no son enteramente nuestros y nosotros no somos de nuestros amores.
Todos guardamos algo que nos hace enteramente nuestros y nadie suele compartirlo.
Guardamos secretos, inseguridades, problemas, opiniones.
Siendo todo esto, ¿cómo alguien puede decir 'soy totalmente tuya/o'?
¿Cuándo se supone que le pertenecemos a alguien? ¿Cuándo podemos decir que esa persona está entregando tanto de sí como uno mismo lo está haciendo? ¿Cuándo podría decir mío, sin estricto derecho de propiedad? Mío da sentido de propiedad, pero, ¿quién dijo que las personas terminan siento estrictamente nuestras?
Nunca somos eternamente de nuestros padres y nuestros padres no son eternamente nuestros.
Nuestros amigo no son enteramente nuestros y nosotros de ellos tampoco.
Nuestros amores no son enteramente nuestros y nosotros no somos de nuestros amores.
Todos guardamos algo que nos hace enteramente nuestros y nadie suele compartirlo.
Guardamos secretos, inseguridades, problemas, opiniones.
Siendo todo esto, ¿cómo alguien puede decir 'soy totalmente tuya/o'?
domingo, 9 de junio de 2013
100 libros que hay que leer antes
de morir
El reto consiste en leer todos los libros que aparecen en la lista de abajo e ir tachándolos conforme los vayas leyendo.
1. Trilogía de El señor de los anillos, de
J.R.R. Tolkien
2. 1984, de George Orwell
3. Al este del Edén, de John Steinbeck
5. Matar a un ruiseñor, de Harper Lee
6. El señor de las moscas, de William Golding
7. Orgullo y prejuicio, de Jane Austen
8. Cumbres borrascosas, de Emily Brönte
9. Hamlet, de William
Shakespeare
10. El gran Gatsby, de Francis Scott Fitzgerald
11. Don Quijote, de Miguel de Cervantes
12. El guardián entre el centeno, de J. D.
Salinger
13. Ulysses, de James Joyce
14. El diario de Ana Frank, de Ana Frank
15. Anna Karenina, de Leon Tolstoi
16. Un mundo feliz, de Aldous Huxley
17. Trampa 22, de Joseph Heller
18. Cuento de Navidad, de Charles Dickens
19. En el camino, de Jack Kerouac
20. La guerra de los mundos, de H. G. Wells
21. Alguien voló sobre el nido del cuco, de Ken
Kesey
22. Las mil y una noches.
23. Las cuitas del joven Werther, de J. W.
Goethe
24. Robinson Crusoe, de Daniel Defoe
25. Los viajes de Gulliver, de Jonathan Swift
26. Romeo y Julieta, de William Shakespeare
27. La Divina Comedia, de Dante Alighieri
28. Notre Dame de París, de Victor Hugo
29. Madame Bovary, de Gustave Flaubert.
30. Crimen y castigo, de Fiodor Dostoievski
31. La metamorfosis, de Franz Kafka
32. El viejo y el mar, de Ernest Hemingway
33. Manhattan Transfer de John Dos Passos
34. Las uvas de la ira, de John Steinbeck
35. En busca del tiempo perdido, de Marcel
Proust
36. El Principito, de Antoine de Saint Exupery
37. ¿Sueñan los androides con ovejas
eléctricas?, de Phillip K. Dick
38. El extraño caso del Dr. Jekyll y Mr. Hyde,
de Robert Louis Stevenson
39. Viaje al centro de la Tierra, de Julio Verne
40. 20.000 leguas de viaje submarino, de Julio
Verne
41. Juan Salvador Gaviota, de Richard Bach
42. El mago de Oz, de L. Frank Baum
43. De ratones y hombres, de John Steinbeck
44. Sueño de una noche de verano, de William
Shakespeare
45. Los miserables, de Victor Hugo
46. Oliver Twist, de Charles Dickens
47. El Lazarillo de Tormes
48. La Celestina, de Francisco de Rojas
49. La casa de Bernarda Alba, de Federico García
Lorca
50. El Hobbit, de J.R.R. Tolkien
51. La historia interminable, de Michael Ende
52. Los cinco, de Enid Blyton
53. Saga Harry Potter, de J.K. Rowling
54. Torres de Malory, de Enid Blyton
55. La elegancia del erizo, de Muriel Barbery
56. Cien años de soledad, de Gabriel García
Márquez
57. La senda del perdedor, de Charles Bukowski
58. Leyendas, de Gustavo Adolfo Becquer
59. Memorias de Idhún, de Laura Gallego García
60. La vida es sueño, de Pedro Calderón de la
Barca
61. Bel Ami, de Guy de Maupassant
62. Ilusiones, de Richard Bach
63. Mujercitas, de Louisa May Alcott
65. Platero y yo, de Juan Ramón Jiménez
66. Siddharta, de Herman Hesse
67. El Cantar de Mio Cid
68. La campana de cristal, de Sylvia Plath
69. Moby Dick, de Herman Melville
70. Frankenstein, de Mary Shelley
72. Historia de una escalera, de Antonio Buero
Vallejo
73. Luces de bohemia, de Ramón María del
Valle-Inclán
74. El curioso incidente del perro a medianoche,
de Mark Haddon
75. Drácula, de Bram Stoker
76. Las aventuras de Huckleberry Finn, de Mark
Twain
77. La isla del tesoro, de Robert Louis
Stevenson
78. La letra escarlata, de Nathaniel Hawthorne
79. El llano en llamas, de Juan Rulfo
80. Miedo y asco en Las Vegas, de Hunter S.
Thompson
81. Entrevista con el vampiro, de Anne Rice
82. Lolita, de Vladimir Nabokov
83. La naranja mecánica, de Anthony Burgess
84. Pippi Calzaslargas, de Astrid Lindgren
85. Rebelión en la granja, de George Orwell
86. Rojo y negro, de Stendhal
87. Trainspotting, de Irvine Welsh
89. Los tres mosqueteros, de Alejandro Dumas
90. La vuelta al mundo en 80 días, de Julio
Verne
91. La Metamorfosis, de Ovidio
92. Colmillo Blanco, de Jack London
93. El crepúsculo de los ídolos, de Friedrich
Nietzsche
94. Don Juan Tenorio, de José Zorrila
95. Las peregrinaciones de Childe Harold, de
Lord Byron
96. Adiós a las armas, de Ernest Hemingway
97. El sabueso de los Baskerville, de Arthur
Conan Doyle
98. Episodios nacionales, de Benito Pérez Galdós
99. David Copperfield, de Charles Dickens
100. Los cuentos de Edgar Allan Poe
sábado, 8 de junio de 2013
domingo, 26 de mayo de 2013
—¿Has sentido esa sensación de caer en el vacío? Caer, caer, caer... caer hasta que es ridículamente imposible; sentir tu corazón a mil por hora, como si no hubiese algo más importante que esa sensación.
Tus manos sudan, tu cabeza palpita, tu respiración agitada y sofocada, como si no existiera nada que pudieras decir en esos momentos, como una opresión en el pecho que no permite que pienses en otra cosa que no sea caer y un grito que está muriendo en tu boca.
Las ganas de querer arañar el aire, por un lugar donde aferrarte... cualquier cosa, con tal de que todo se detenga y el pánico acabe; mientras un rincón de tu cuerpo se librera, es feliz, por un pequeño momentos y sientes la euforia en ti.
—Creo que estás loca, Alicia...
viernes, 24 de mayo de 2013
Los candados de París.
Ella era un tonta chica enamorada de la idea del amor, cursi y soñadora. Enamorada de él.
Él era un tonto chico enamorado de la vida, aventurero y lindo. Enamorado de ella.
—Vayamos a París,—dijo ella.
—¿A qué iríamos allá?—respondió él.
—¿Has oído hablar de los candados de París?—su mirada soñadora, como siempre había sido.
—¿Crees en esas cosas?—Dijo él, burlándose. Nadie entendía cómo estaban juntos sí eran tan diferentes.
—Creo en cualquier cosa que sea cursi, cariño. Por algo creo en ti.
—¡Hey, yo no soy cursi!—El ceño de su frente siempre marcado por su culpa, que la hacia reírse de él.
—Lo eres, eres tan cursi me llevarás a Francia a poner un candado en ese puente, mientras grabas nuestros nombres en él, y me juras amor eterno.—Dijo riendo.
—¿Y por qué haría eso?
—Porque tú me amas—Lo dijo con tanta convicción como si fuera un hecho inconfundible, como si nada pudiera romper lo que sentían el uno por el otro... como si fuera real. Él suspiró y la tomó en brazos.
—Soy un cursi, entonces.
Cuando lo contaron, nadie les creyó, pero dos meses después estuvieron en París, su candado aún puede verse, grabado con sus nombres y la promesa de un amor... Candado que vio su hija, cuando visitaron el puente muchos años después, y ellos seguían igual que años atrás.
¿Qué se sentirá ser la muerte?
Muerte, ¿qué se siente ser tú?
Cada vez que mencionan tu nombre hay terror, tristeza, desesperanza y, a veces, belleza morbosa.
Pero, ¿de verdad eres tan mala? ¿Disfrutas de matar gente? ¿Disfrutas dejar dolor en las familias?
¿Nunca habrás hecho un amigo vivo? ¿Alguna vez te habrás encariñado con alguien?
A veces lo dudo. No creo que seas tan mala, pero eres un equilibrio natural.
Y equilibrio significa bueno y malo, vivo y muerto. Así que a veces también te odio.
¿Será que más bien odias tu trabajo y no hay nadie que lo sepa?
¿Será que vendrás temprano por mí, o vendrás tarde? ¿Qué se sentirá irse de este mundo? ¿Tú sentirás algo cuándo nos llevas? ¿Verás a las familias llorar por tu culpa? ¿O actúas cómo una simple empleada... recogiendo nuestro "último aliento"? ¿Habrás conocido la vida de alguien a través de los años... antes de "matarlo"? ¿Puedes impedir suicidios sí quieres? ¿Puedes perdonar la vida de alguien? ¿Puedes dar un poco más de tiempo?
Me pregunto tantas cosas sobre ti, y me pregunto siempre qué se siente ser tú.
Cada vez que mencionan tu nombre hay terror, tristeza, desesperanza y, a veces, belleza morbosa.
Pero, ¿de verdad eres tan mala? ¿Disfrutas de matar gente? ¿Disfrutas dejar dolor en las familias?
¿Nunca habrás hecho un amigo vivo? ¿Alguna vez te habrás encariñado con alguien?
A veces lo dudo. No creo que seas tan mala, pero eres un equilibrio natural.
Y equilibrio significa bueno y malo, vivo y muerto. Así que a veces también te odio.
¿Será que más bien odias tu trabajo y no hay nadie que lo sepa?
¿Será que vendrás temprano por mí, o vendrás tarde? ¿Qué se sentirá irse de este mundo? ¿Tú sentirás algo cuándo nos llevas? ¿Verás a las familias llorar por tu culpa? ¿O actúas cómo una simple empleada... recogiendo nuestro "último aliento"? ¿Habrás conocido la vida de alguien a través de los años... antes de "matarlo"? ¿Puedes impedir suicidios sí quieres? ¿Puedes perdonar la vida de alguien? ¿Puedes dar un poco más de tiempo?
Me pregunto tantas cosas sobre ti, y me pregunto siempre qué se siente ser tú.
jueves, 16 de mayo de 2013
Ella leyó sobre personas que quería ser y aventuras que quería vivir,
amores que quería conocer y amigos que quería tener;
leyó sobre historias mágicas que quería hacer y sentimientos que quería sentir.
Ella se imaginó viviendo todo lo que sucedía en sus libros, trayendo a sus personajes a la vida, o internándose en cada páginas y cada olor..
Así que...
Ella leyó sobre cosas que no podría vivir, personajes que no podría conocer y de sueños imposibles, pero fantasía que podía cumplir siempre en su mente.
Gays. ¿Cuál es el problema?
Estoy tan harta de escuchar comentarios ofensivos en contra de las personas gays; personas que son tan normales como cualquier otra y sólo se diferencian de la mayoría por su orientación sexual.
Amor es amor. ¿Hace alguna diferencia el sexo?
La gente es criticada por cómo se viste, cómo actúa, cómo se peina, cómo piensa, y un sin fin sin cosas más, que si no están de acuerdo con la "sociedad" la gente va a criticar, pero al parecer critican más a las personas "gays".
Comentarios como "dan asco", "eso no debería existir", "va en contra de la naturaleza", "es un pecado", "los gays no deberían casarse o tener hijos". ¡¿POR QUÉ NO?! Eso no debería molestarle a nadie, y menos a alguien que no lo entiende, no debería considerarse un pecado, tampoco.
Y menos 'no natural', por algo ellos quieren sentir así.
La gente tiene miedo a lo diferente. A veces me gusta pensar eso, antes de pensar que no aceptan eso por estupideces.
¿Por qué no puede haber un matrimonio gay o no pueden adoptar a un niño? Podría incluso tener más amor que en una familia que consideramos "normal" de papá y mamá. ¿Ellos se quejan de la gente no gay? ¿O prohíben un matrimonio?
¿Cómo sí pueden respetar a los demás? Cuando a ellos los insultan.
¿Cómo algunos todavía sí pueden creer en Dios? Cuando eso está visto como "un pecado".
¿Cómo sí pueden ser más felices que una pareja "normal"?
Ellos no juzgan a las personas, mientras a ellos los critican por su orientación sexual.
Ellos son personas tanto como lo sería cualquier otra.
¿Por qué aún estando en este siglo tienen problema con eso? La homofobía no debería considerarse ni siquiera una enfermedad, no ahora.
Odio cada maldito segundo que insultan u 'odian' a las personas por ser gays, por amar a personas de su mismo sexo y no otros. Lo odio.
Amor es amor. En cualquier tipo de sexo.
Amor es amor. ¿Hace alguna diferencia el sexo?
La gente es criticada por cómo se viste, cómo actúa, cómo se peina, cómo piensa, y un sin fin sin cosas más, que si no están de acuerdo con la "sociedad" la gente va a criticar, pero al parecer critican más a las personas "gays".
Comentarios como "dan asco", "eso no debería existir", "va en contra de la naturaleza", "es un pecado", "los gays no deberían casarse o tener hijos". ¡¿POR QUÉ NO?! Eso no debería molestarle a nadie, y menos a alguien que no lo entiende, no debería considerarse un pecado, tampoco.
Y menos 'no natural', por algo ellos quieren sentir así.
La gente tiene miedo a lo diferente.
¿Por qué no puede haber un matrimonio gay o no pueden adoptar a un niño? Podría incluso tener más amor que en una familia que consideramos "normal" de papá y mamá. ¿Ellos se quejan de la gente no gay? ¿O prohíben un matrimonio?
¿Cómo sí pueden respetar a los demás? Cuando a ellos los insultan.
¿Cómo algunos todavía sí pueden creer en Dios? Cuando eso está visto como "un pecado".
¿Cómo sí pueden ser más felices que una pareja "normal"?
Ellos no juzgan a las personas, mientras a ellos los critican por su orientación sexual.
Ellos son personas tanto como lo sería cualquier otra.
¿Por qué aún estando en este siglo tienen problema con eso? La homofobía no debería considerarse ni siquiera una enfermedad, no ahora.
Odio cada maldito segundo que insultan u 'odian' a las personas por ser gays, por amar a personas de su mismo sexo y no otros. Lo odio.
Amor es amor. En cualquier tipo de sexo.
miércoles, 8 de mayo de 2013
Ellos...
Ellos habían pasado momentos, los más bellos juntos.
Como la vez que corrieron por la casa de ella y él se estrelló en la pared, al resbalar en el piso recién pulido. La vez que tallaron sus nombres en aquel roble frondoso que había en el parque, y a ella le pareció los más tonto y lindo del mundo.
Aquella vez, que se quedaron en silencio, escuchando sus respiraciones, el fuerte suspiro y aspiro de cada uno, y le hacían una exuberante factura al teléfono de casa de sus padres.
O la otra vez...
—¿Lo recuerdas?—Dijo él.
—¿La lluvia?—Respondió ella.
—Ajá.
Y fue todo lo que dijeron, antes de pararse a mitad de la calle, mientras caía una pequeña tormenta y bailaban sin escuchar música, como si no hubiera mejor cosa, como habían hecho una vez.
Y, tal vez, no todo estaba perdido.
We are young.
Esta noche somos jóvenes.
Esta noche podemos hacer lo que queramos.
Esta noche es para comernos el mundo,
para amar hasta perder la razón,
para hacer recuerdos.
Beber hasta morir, (tal vez).
Para dejar nuestra huella,
para ser todo lo que queremos ser y no somos,
para dejar atrás todos los temores,
para perder el control por una vez,
para hacer amigos y el amor el algún sitio.
Esta noche podríamos enloquecer, arder como fuegos artificiales, explotar más allá de las estrellas.
Porque, esta noche somos jóvenes.
Demons.
Adentro, el fondo, en la oscuridad.
Ahí es donde mis demonios se esconden.
Donde siempre son libres, donde consumen mi ser, donde pueden destruirme. Como los días oscuros, cuando me desespero.
Cuáles son mis demonios... Mis peores demonios. ¿Cuáles son los tuyos?
Yo soy ellos, tomando lo peor de mí, salvando lo mejor de mí. Como la luz extinguiéndose en la noche, como un grito en de ayuda en el vacío, sin ser escuchado.
Ahí, en la oscuridad, es donde mis demonios se esconden.
Ella...
Sé por qué ella te gusta.
Ella es fabulosa, es adorable.
Ella es como el sol que sale, cuando quieres que deje de llover.
Ella simplemente es una persona que puede hacerte sonreír, ¿cómo no amarla? Sería un pecado no hacerlo.
Ni siquiera es mi mejor amiga, pero es algo más que una conocida, por eso es que lo sé.
Cuídala, creo que ella vale oro.
martes, 7 de mayo de 2013
Me arrepiento.
Me arrepiento de todas las cosas que callé y de algunas que dije.
Me arrepiento de todas las cosas que no hice y quería hacer.
Me arrepiento de todas las veces que me sentí menos, cuando no debía.
Me arrepiento de todas las cosas que perdí, por miedo.
Me arrepiento de todas las veces que ser tímida venció en mí.
Me arrepiento de todas las veces que sentí cosas que no estaban bien.
Me arrepiento de todos los mementos que no aproveché y ya no tengo oportunidad.
Me arrepiento de tantas cosas, pero sobre todo... Me arrepiento de arrepentirme de todas esas cosas.
domingo, 5 de mayo de 2013
Un tipo de estereotipo.
Me molestan los estereotipos.
Me molestan muchos estereotipos, pero quiero nombrar uno.
¿Por qué una persona que lee no puede gustarle salir de fiesta? ¿Por qué tiene que usar puros converse y ropa sencilla, en vez de tacones y vestidos?
Demasiadas veces he visto "prefiero usar converse sobre tacones", "prefiero leer que ir de fiestas", "mejor leer que tomar"; siempre de personas que leen. Me pregunto yo, ¿es que una persona que lee no puede gustarle salir de fiesta, beber, usar vestidos y salir? ¿Y aún así gustarle leer? ¿No pueden con las dos cosas?
Sí, SÍ PUEDEN.
Pero la mayoría de la gente está tan obsesiona en encasillar todo de una manera. Eso me parce imposible.
¿Es difícil que a una persona le guste leer y ser fiestera? No. No lo es.
Leer es casi como respirar para mí, pero me gusta ir de fiestas. Me encanta.
Así que aquí estoy, intentando entender ¿por qué todo lo encasillan?, ¿por qué todo debe ser de una manera?, ¿por qué una persona que lea debe ser de tal manera?
¿Por qué un estereotipo?
Vacía...
Estoy deprimida... No, creo que deprimida no es la palabra, pero no conozco una mejor.
No en estos momentos.
No ha pasado nada en mi vida para estar triste, pero me siento vacía. Siento que no soy yo, y sí no soy yo, ¿entonces quién se supone que estoy siendo?
Se siente como un gran peso.
Estoy aburrida. Estoy pasando un buen momento y me estoy aburriendo igual.
Necesito hacer algo con mi vida, ahora. Siento cómo el vacío me está consumiendo, un vacío que aún no le encuentro sentido.
¿Cómo puede ser esto? ¿Un vacío sin estar triste? ¿Deprimirme sin razón? A veces tengo ansiedad.
Quiero saber sí me estoy perdiendo. Necesito saber qué se supone que estoy siendo...
No en estos momentos.
No ha pasado nada en mi vida para estar triste, pero me siento vacía. Siento que no soy yo, y sí no soy yo, ¿entonces quién se supone que estoy siendo?
Se siente como un gran peso.
Estoy aburrida. Estoy pasando un buen momento y me estoy aburriendo igual.
Necesito hacer algo con mi vida, ahora. Siento cómo el vacío me está consumiendo, un vacío que aún no le encuentro sentido.
¿Cómo puede ser esto? ¿Un vacío sin estar triste? ¿Deprimirme sin razón? A veces tengo ansiedad.
Quiero saber sí me estoy perdiendo. Necesito saber qué se supone que estoy siendo...
viernes, 3 de mayo de 2013
Charles Bukowski.
"Algunas personas nunca enloquecen. Que tortura de vida deben llevar. Personas condenadamente aburridas. Poblando el mundo, procreando personas condenamente aburridas... Qué horrible espectáculo imaginar la tierra poblada de ellos".
jueves, 25 de abril de 2013
Ser importante.
No quiero ser el centro de atención, pero quiero ser importante.
Quiero ser la primera opción de la gente.
Quiero que al salir sea de las primeras en considerar invitar.
Quiero que alguien pregunte por mí si un día falto a clases.
Quiero importarle a alguien.
Quiero importarle a alguien y no por las razones egoístas de querer ser un centro, quiero ser importante para alguien porque sé que eso está bien. Porque es lindo que alguien se acerque a preguntar por ti. Porque quiero saber que no sobro. Porque quiero librarme del sentimiento de ser la parte sobrante del grupo. Porque quiero saber que, en algún momento, soy importante para alguno de mis amigos. Porque quiero saber que alguien se preocuparía por mí si llegara a desaparecer...
Así que... no quiero ser un centro, pero quiero ser importante, para saber que le importo a alguien.
Quiero ser la primera opción de la gente.
Quiero que al salir sea de las primeras en considerar invitar.
Quiero que alguien pregunte por mí si un día falto a clases.
Quiero importarle a alguien.
Quiero importarle a alguien y no por las razones egoístas de querer ser un centro, quiero ser importante para alguien porque sé que eso está bien. Porque es lindo que alguien se acerque a preguntar por ti. Porque quiero saber que no sobro. Porque quiero librarme del sentimiento de ser la parte sobrante del grupo. Porque quiero saber que, en algún momento, soy importante para alguno de mis amigos. Porque quiero saber que alguien se preocuparía por mí si llegara a desaparecer...
Así que... no quiero ser un centro, pero quiero ser importante, para saber que le importo a alguien.
martes, 23 de abril de 2013
Las cosas que no dijimos.
Ese día dijimos muchas cosas, y creo que realmente no dijimos nada.
No, realmente no lo hicimos.
No sé sí fue porque empecé a gritar o porque tú no parabas de insultarme. (O sí fue por la profesora en el otro salón que nos mandó a callar). Sigo sin entender cómo fue que empezó todo. No es que nunca hubiésemos peleado, pero algo era diferente. Creo que fue porque me sentí traicionada, o porque fui tan estúpida de no ocuparme de mis problemas, de todas maneras, eso desencadenó todo.
Así que lo que estoy pensando es... ese gritamos mucho; oh sí, como gritamos. Pero también creo que pedimos perdón, ya ni sé por qué lo hicimos. Pero quiero pensar en qué no dijimos.
Nunca dijimos cómo seguiríamos, creo que era muy tarde para eso. O lo incomoda que me sentiría estando a tu lado sin ser lo mismo de antes, lo mucho que extrañaría caminar contigo a casa, después del colegio y quejarnos de los profesores. Cómo seguirías siendo amigo de mis amigas, sin que pudiéramos hablar todos juntos. Las veces que miraría a tu casa, recordando cuando nos íbamos juntos. Que me molestarían cosas tuyas y no podría decirte; o que dirías algo gracioso y yo no me reiría de tus chistes. El silencio incomodo de estar juntos por obligación... Sí, creo que no dijimos esas cosas.
Y me gustaría haber hablado de eso, porque ahora tengo esas preguntas en mi cabeza, y no sé cómo contestarlas...
De cualquier manera, ya ni sé por qué estoy escribiendo esto. Creo que quería decirte adiós, tal vez, el adiós que nunca te dije en persona.
sábado, 20 de abril de 2013
Pequeños detalles.
—¿Por qué todos tienen que ser así...?
—¿Así cómo?
—Bueno, así, cada vez que me intereso por alguien termina siendo un imbécil.
—Tal vez te enamoras de muchos imbéciles.
—¡No es tanto! Sólo quiero que entiendan los detalles...
¿Qué detalles? ¿Esos pequeños detalles que yo solo noto? Esas marcas que tienes en las mejillas de lo mucho que sonríes, el ceño que le frunces al espejo cuando tu cabello no quiere tomar forma, la manera en que terminas con la nariz sucia cada vez que comes helado, la manera en que contraes el estomago cuando ves algo que no te gusta, lo mucho que te enojas cuando no te salen bien las cosas, los pequeños tics nerviosos que tienes que ni tú misma sabes que tienes, la manera en que mueves los pies cuando estás en público y te da pena bailar, cuando te muerdes el labio para no gritar mientras estás molesta... ¿ese tipo de detalles? Porque aún sé muchos más.
—Creo que simplemente te enamoras de muchos imbéciles...
—¿Así cómo?
—Bueno, así, cada vez que me intereso por alguien termina siendo un imbécil.
—Tal vez te enamoras de muchos imbéciles.
—¡No es tanto! Sólo quiero que entiendan los detalles...
¿Qué detalles? ¿Esos pequeños detalles que yo solo noto? Esas marcas que tienes en las mejillas de lo mucho que sonríes, el ceño que le frunces al espejo cuando tu cabello no quiere tomar forma, la manera en que terminas con la nariz sucia cada vez que comes helado, la manera en que contraes el estomago cuando ves algo que no te gusta, lo mucho que te enojas cuando no te salen bien las cosas, los pequeños tics nerviosos que tienes que ni tú misma sabes que tienes, la manera en que mueves los pies cuando estás en público y te da pena bailar, cuando te muerdes el labio para no gritar mientras estás molesta... ¿ese tipo de detalles? Porque aún sé muchos más.
—Creo que simplemente te enamoras de muchos imbéciles...
martes, 16 de abril de 2013
...
Me dijeron que la magia no existía; puf, como si Santa no fuese real y el ratón Pérez no robara mis dientes.
viernes, 12 de abril de 2013
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